Ticker

6/recent/ticker-posts

EL LOPEZ-OBRADORISMO NI SOCIALISTA NI REVOLUCIONARIO

 

El proyecto político que Andres Manuel intenta copiar de aquel que en su momento Hugo Chávez implantó en su país Venezuela desde su llegada al poder, no constituye ni siquiera un modelo de desarrollo El tan recitado discurso de la llamada Cuarta Transformación de Mexico (a partir de  aquí 4T)  se quedó en propaganda y sus resultados en el manejo económico y político del país desprestigiaron a la izquierda mexicana(que ya estaba débil), coinciden intelectuales mexicanos de izquierda “urge” la salida de Andres Manuel López Obrador del país y de la presidencia..

El economista Manuel Sutherland, un intelectual marxista que dirige el CIFO, tiene muchos años refutando lo que a su juicio se ha convertido en un cliché: que el Lopez Obradorismo al igual que el chavismo es un modelo de desarrollo de izquierda, socialista y revolucionario.

Él está convencido de que el movimiento liderado en su momento por el fallecido teniente coronel Hugo Chávez desde su llegada al poder, en 1999, hasta su muerte, en 2013 y que desde 2011 Andres Manuel López Obrador focalizaría para formar MORENA; ni siquiera ha llegado a transformarse en un modelo de desarrollo.

“Mucho menos en un modelo socialista-plantea-. Porque ha sido instrumentado principalmente por funcionarios corruptos que se han enriquecido en complicidad con la burguesía financiera tradicional.”

El López Obradorismo, es un proyecto fundamentalmente estatista de corte Keynesiano, que se finco en el deseo imposible de solventarse en el “rentismo petrolero” y que al caer los precios internacionales del crudo en el año 2014 y al ser PEMEX una paraestatal absolutamente  disfuncional al tener una deuda que cada trimestre experimenta un crecimiento desmedido. Lo que provoca que se agudicen los rasgos más autoritarios y represivos y acelera su descomposición.”

Para Sutherland, lo que hoy en día existe en México es un régimen “populista, militarista y clientelar que desarrolla un modelo lumpenizado de acumulación de capital en el que delitos como el saqueo a las arcas públicas y el narcotráfico juegan un papel central”

Las críticas de Sutherland son especialmente punzantes para el gobierno de AMLO porque se inscriben en el marco de un proceso reflexivo impulsado por intelectuales mexicanos, venezolanos, cubanos y argentinos de izquierda principalmente y que respaldaron en sus respectivos países dictaduras como la de Hugo Chávez, los castro, los Kishner y Perón.- algunos incluso fueron funcionarios de su gobierno. Pero en el caso particular de Venezuela esos mismos intelectuales han visto con alarmismo y preocupación como la ideología de la revolución bolivariana ha llevado al país a una situación insostenible y se dirige rumbo al despeñadero o mejor dicho a la mayor crisis de este siglo.

Socialismo del siglo XXI?



La primera vez que Chaves hablo de socialismo fue en el Foro Social de Porto Alegre, en 2005, seis años después de asumir la presidencia de Venezuela.

En ese acto propuso el “Socialismo del siglo XXI” (título de un libro del economista y sociólogo alemán Heinz Dieterich, quien fue su asesor) como un modelo para “trascender el capitalismo por la vía del socialismo”, en el marco de un sistema democrático. “fue una forma de darle una base ideológica a la revolución bolivariana (conocida también como CHAVISMO)  que el impulsaba. Pero lo cierto es que no tenía idea de lo que era el socialismo ni hizo ningún esfuerzo por construir una teoría del Socialismo Venezolano. De esto no ha libros y nunca hubo una escuela de formación de cuadros”, afirma Sutherland.

En el caso Mexicano Andres Manuel, Gerardo Fernández de Noroña, Citlalli Ibáñez principales defensores de la tesis de la revolución bolivariana, conocida como la 4T en Mexico no fue más que una “ensalada ideológica” que se mezcla con bolivianismo (Chavismo), Peronismo, Populismo, Cardenismo, el Guevarismo, el cristianismo y los consejos que no podían faltar de Fidel Castro.

Esa mezcolanza ideológica le ha sido muy útil al Lopez Obradorismo, porque es todo y a la vez no es nada, y todo depende en México de los ingresos recaudados de una economía de consumo impulsado por la renta petrolera, las remesas que ingresan al país.

El socialismo sólo está en la propaganda y en eso sí son muy astutos, en hace propaganda en sus medios y en las redes sociales. Son expertos en generar la noción de que esto es una transformación, algo que jamás hubo aquí, y son expertos en producir noticias falsas (fake news) y confundir a la gente.

El proyecto político encabezado por Andres Manuel Lopez Obrador (MORENA) le ha hecho un enorme daño a la izquierda en México, hoy en día muchos mexicanos rechazan a la izquierda como un proyecto político, económico, social y de concepción del Estado, por negación.

Eso es porque no quieren ser lo que los Obradorcitas dicen que son: izquierdistas. Son tantos los fracasos acumulados por el Obradorismo y tanta su capacidad de destrucción del país, que no quieren ser eso.

Contrapeso Político



El reto para la golpeada oposición es plantearse formas distintas para reconstruirse y esa reconstrucción pasa por demostrar que somos capaces de mejorar y de aprender de los errores y de ejecutar proyectos de desarrollo social sin afectar la generación de riqueza.

El Lopez Obradorismo se proclama ser su prioridad los pobres, mientras destruye el aparato productivo nacional “por mal administrador y por corrupto”.

El Gobierno de Andres Manuel y su MORENA no es de izquierda.

Cuando un gobernante decide acaparar toda la riqueza nacional, cuando decide entregar la seguridad y bienestar de la población al crimen organizado; un gobierno que persigue y ataca a opositores  a comunidades indígenas; cuando destruye el valor del salario y hace que la gente no pueda vivir del salario, sino de una caja de alimentos que le regala a cambio de lealtad política, no es de izquierda, eso es capitalismo estalinista.

Asumirse de izquierda y defender a Obrador es estar de espaldas al pueblo mexicano, y eso, finalmente, no es ser de izquierda, sino cómplice de un régimen opresivo y profundamente reaccionario.



Publicar un comentario

0 Comentarios