En mis columnas siempre te dejo pequeñas perlas de sabiduría para que apliques a tu negocio.
A veces son explícitas y otras no tanto.
Las que siguen no sé de qué tipo serán para ti.
Aquí las tienes.
* Enmarca tu producto a través de una historia en la que la persona se sienta identificada. Apela a sus necesidades más profundas.
* Puedes transformar un producto perdedor en uno ganador al cambiar la forma en la que lo presentas ante tu público.
* Si tu producto no está vendiendo, puedes cambiarle la presentación, o el título (nombre del producto).
* Una necesidad profunda es la de ser aceptado y reconocido por los demás. Úsala para persuadir.
* Los bullets son útiles para vender productos súpercaros usando una o dos frases, incluso si nunca antes habían escuchado acerca del producto o servicio.
* Un titular en realidad es un bullet que te hará decidir si entras o no a leer el artículo (¿ya aplicaste los 397 bullets o los tienes comiendo polvo en tu pc?) y también puedes usarlos en volantes publicitarios.
* Los asuntos de email también son bullets.
* Las cartas de venta te sirven como un guión para convencer a los demás de lo espléndido que es tu producto o servicio.
* No importa si vendes en línea o en persona, si lo haces vía Facebook, Shopify, MercadoLibre o si lo haces en tu oficina o local, una carta de venta te ayudará a comunicarte mejor con tu prospecto.
* Puedes usar storytelling para vender. Sí, contar historias.
* Analiza las cartas de venta que encuentres (las de la competencia, mucho más).
* Transforma las características de tu producto en beneficios que hagan que tu cliente grite de la emoción: "¡ESTO ES LO QUE NECESITO!"
* Lo que no cuesta, no se valora (una verdad a gritos).
¡Vaya! Se me fue la mano en el teclado.
¿Quieres algo más? ¿Saber cómo aplicarlos?
Tengo una guía muy potente en PDF en la que explico mis "secretos" y mi experiencia para crear ofertas irresistibles.
Funcionan si lo llevas a la práctica.
"¿Y si no tengo dinero?", quizá te preguntes.
Entonces lee mis columnas y busca lo que digo. Encuentra las pepitas de oro que se van quedando en el camino con cada correo.
Si prestas suficiente atención, las notarás.
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